El Golpe de Estado, fin último de la acusación de narcogobierno vs. México

I

La oposición en México, específicamente la oposición electoral está concentrando sus esfuerzos en posicionar una narrativa de que en la actualidad existe un narcogobierno, esta acción tiene como principal objetivo, generar un clima de escepticismo y duda de la sociedad hacia el gobierno federal encabezado por Andrés Manuel López Obrador (AMLO) y su partido político Movimiento de Regeneración Nacional (Morena).

 

Pero ¿Cuál es el beneficio directo de generar o sembrar la duda de la población hacia el gobierno de AMLO y Morena? ¿No se supone que les interesa ganar la presidencia? ¿Por qué fijar sus esfuerzos en generar esa narrativa?

 

Este tipo de estrategias sólo pueden funcionar cuando los actores principales cuentan con el respaldo de fuerzas internacionales (entiéndase gobiernos extranjeros, principalmente Estados Unidos de Norteamérica) y es allí en donde encontramos la respuesta a las preguntas anteriores.

 

El beneficio de sembrar la duda en la sociedad sobre la supuesta filtración del crimen organizado en el actual gobierno prepara un escenario que desacredita y despoja de autoridad a los representantes electos de manera democrática para que, llegado el momento, se conjuguen escenarios preparados de desestabilidad política, económica y judicial para deponer a las autoridades y llegar al poder sin consultar al pueblo.

 

De lo anterior tenemos claros ejemplos como lo sucedido en Brasil, Argentina, Colombia, Chile, Bolivia y Perú, países que han sido víctimas del lawfare o Golpe Blando. Pero estos esquemas también se aplican en los Golpes Militares de Estado, como ejemplo podemos revisar los casos de Venezuela en 2002 y de Chile en 1973.

 

Entonces, ¿nuestro país podría sufrir un Golpe Blando o uno Militar en los próximos años? Desafortunadamente la respuesta es afirmativa, esto por tres factores, dos externos y uno interno que son viables a corto y mediano plazo.

 

Los dos primeros factores son por cuestiones geopolíticas, nuestros vecinos del norte tendrán elecciones presidenciales este año, y como cada 4 años han puesto mucho énfasis en culpar a México de sus problemas internos, pero en esta ocasión las baterías están dirigidas a un problema de salud pública y de seguridad nacional como lo es el tráfico y consumo de drogas combinadas con fentanilo.

 

El tráfico de estupefacientes por parte del crimen organizado mexicano puede ser utilizado como chivo expiatorio para una posible intervención militar hacia nuestro país, por ello, es importante revisar las declaraciones y los esfuerzos de instituciones privadas y públicas gringas respecto a la supuesta relación entre el crimen organizado y el gobierno actual de nuestro país.

 

Además de lo anterior tenemos que, a pesar de que la relación comercial entre Estados Unidos de Norteamérica y México es una especie de simbiosis económica, el crecimiento de las relaciones comerciales de nuestro país con China genera incomodidad a los estadounidenses, esto aunado a que el actual gobierno está protegiendo el litio de su explotación privada y extranjera, esto suma tensión entre los dueños de los grandes capitales que ven estas políticas públicas como una traición y una pérdida de sus privilegios.

 

El tercer factor, que sería el interno, tiene que ver con la posición entreguista e intervencionista de la oposición en nuestro país, quienes no vacilarán en hincar la rodilla a los gobiernos y organismos extranjeros que los ayuden a recobrar el poder y sus privilegios, sin importarles el bienestar del pueblo mexicano.

 

II

La semana pasada hablé sobre el viaje de Xóchitl Gálvez a EEUU para entrevistarse con el presidente de la Organización de Estados Americanos (OEA), Luis Almagro, y de pedir de manera explícita el apoyo y la intervención del presidente Joe Biden en el proceso electoral mexicano del presente año (recordemos la famosa frase wok de tok).

 

Esta postura entreguista de la candidata del Frente Amplio por México (PRI, PAN, PRD y organizaciones privadas) Xóchitl Gálvez, tomó nuevos bríos después de su viaje a España, en donde se encontró con el ex presidente Felipe Calderón Hinojosa.

 

Gálvez se entrevistó con el autoexiliado expresidente para afinar los detalles de la campaña y guerra sucia en contra de la candidata de Morena Claudia Sheinbaum y el presidente AMLO.

 

No es casualidad que justo cuando salió el ataque orquestado en contra de AMLO en 3 medios internacionales con información filtrada por la CIA, la etiqueta de #narcogobierno entre otras hayan sido tendencia en la plataforma X (antes Twitter) por 11 días.

 

Según Mario Delgado, presidente nacional de Morena, aseguró que su equipo realizó una investigación sobre dicho fenómeno, y encontraron que estos ataques estaban orquestados por los opositores al gobierno, y aseguró que estos han gastado aproximadamente 1 millón de dólares ($17,051,000 pesos mexicanos) a la semana para dicha actividad en cuentas de bots provenientes de más de 50 países.

 

Curiosamente, tras las declaraciones de Mario Delgado, estas etiquetas desaparecieron de la plataforma antes mencionada sin dejar rastro alguno, fortaleciendo la sospecha de que la guerra sucia en contra de Sheinbaum y AMLO está orquestada entre la oposición mexicana e intereses extranjeros.

 

Resulta doblemente curioso y sospechoso que justo en la semana en que se llevaría a cabo la denominada “marcha  por la democracia” el portal Latinus publicara un reportaje y entrevista de un supuesto integrante del grupo criminal denominado “los ardillos”, quien aseguró que en 2006 formaba parte del grupo criminal “Los Zetas” de quienes dijo dieron dinero a la campaña presidencial de AMLO en 2006.

 

Esta información, además de que ya fue desmentida por el gobierno federal, también fue refutada por la periodista y politóloga Guadalupe Correa Cabrera (Los Zetas Inc. Temas Hoy, 2018) quien en entrevista con Julio Hernández “Astillero” señaló que en esos años los Zetas eran un brazo armado del Cartel del Golfo, por lo que las declaraciones del supuesto criminal no cuadran con la realidad, pues en caso de que las declaraciones fueran verdaderas, esta supuesta actividad debería haber sido ordenada desde la cúpula del Cartel del Golfo y no del brazo armado.

 

La “marcha por la democracia”, que no fue tal (al menos en la Ciudad de México), sino un mitin en la plancha del zócalo, sostiene la narrativa de que el actual gobierno está empeñado en destruir instituciones “democráticas y autónomas”, sin embargo, hacen caso omiso de las arbitrariedades cometidas por los directivos de éstas, así como de las violaciones a la ley que realizan cuando ven afectados sus intereses.

 

III

Las dos candidatas mejor posicionadas en las preferencias electorales viajaron al Vaticano para conseguir la gracia del Papa Francisco, y poder congraciarse con la grey católica en México, que si bien representa un sector importante del electorado, no es el más significativo, toda vez que dentro de esta religión existe una división marcada entre guadalupanos y católicos tradicionales, los primeros no suelen acudir a las homilías semanales, ni atienden las encíclicas papales, y solo acuden a los templos en festejos como bodas, bautismos y XV años, y por supuesto el 12 de diciembre, día de la virgen de Guadalupe.

            

Como integrantes de un estado Laico debemos exigir que quienes aspiran a gobernarnos separen la religión de lo político, y dejen sus expresiones espirituales en el ámbito de lo privado, y que si lo que se trata es de forjar relaciones diplomáticas, esperen a ser autoridades para tomarse la foto con el dirigente del Estado Vaticano.

 

Y mientras Israel sigue bombardeando Palestina y la comunidad internacional sale a las calles para manifestarse en contra de las acciones de Netanyahu, mandamos un saludo y una felicitación a Esther Díaz, Jesús Lira y Oswaldo Ceniceros por los 7 años al aire de manera ininterrumpida del programa radiofónico “Mestiza: valorando el pasado y vislumbrando el futuro” que se transmite todos los domingos por el 100.5 FM y www.radio.ujed.mx, nos leemos la próxima semana, en la que lo más seguro es que haya de chile, de mole y de manteca.