El discurso del miedo, corazón de la campaña de Xóchitl Gálvez

El miedo como estrategia de control y manipulación política, es la propuesta de Xóchitl para su campaña a la presidencia. Así lo expuso en su inicio oficial de campaña en Fresnillo, Zacatecas. El discurso del miedo va a ser el corazón de su campaña.

Al mejor estilo del Ku Klux Klan, símbolo infame del odio, secta racista gringa, Xóchitl Gálvez, la medianoche del viernes, veladora en mano, inició su precipicio a la mayor derrota y vergüenza electoral que va a sufrir la ultraderecha mexicana.

El Ku Klux Klan, integrado por hombres de raza blanca, encapuchados, hacen sus reuniones a la medianoche, con veladora encendida, para infundir miedo. Miedo y terror en la población que no sea de raza blanca, principalmente contra los afroamericanos.

Xóchitl recurre al miedo. Recurre a la emoción y no a la razón. Misma estrategia que usó Felipe Calderón. Acude al miedo y a la ignorancia.

El miedo es la emoción que nos ciega y nos impide razonar. Miedo a que te quiten la casa. Te expropien tu negocio. Miedo a perder tus privilegios de clase y casta. Miedo al comunismo que hace veinte años no existe. Miedo a tener miedo.

Luego, en la tradición siciliana de la mafia, Xóchitl en su imperfecto francés españolizado, firmó con su sangre, sus promesas de sangre y muerte, sus amenazas de genocida y crimen.

Xóchitl es cosa nostra, diría Don Corleone. Las firmó con sangre porque ya nadie cree en su palabra. Ni ella misma.

El plan de gobierno de Xóchitl es uno solo, el miedo, inculcarlo, manipular con la emoción provocada por el miedo irracional. Usarlo como si los mexicanos no supiéramos quienes son ellos. Ellos son responsables de ese miedo que ahora dicen van a combatir.

Mentira que todo México tenga miedo. Es miedo hacia ella misma. Miedo ante las propuestas que hizo ya como candidata oficial.

Propone implantar mano dura. Volver al genocidio de la sociedad civil, como lo hizo su guía espiritual Felipe Calderón, de quien recibió su bendición en su gira por España, donde Xóchitl Gálvez, se toma la foto con este asesino, casi a escondidas, con fondo de los baños de un restaurant, sonriente la señora dizque indígena y trotskista con el mayor genocida, el mayor capo del narcoestado que fue y es, el espurio Calderón. Eso sí nos da miedo a los mexicanos.

Dice Xóchitl que creará una super prisión de máxima seguridad. Al estilo Bukele en El Salvador, para encerrar a todos los delincuentes, sin juicio ni llevarlos a tribunal. Se le olvida que El Salvador es un país pequeñito, quizá como Colima. Y México somos 120 millones de habitantes.

No menciona si en esta super prisión también albergará a sus compinches, a todo su gabinete que es una sarta de delincuentes corruptos, que han robado y saqueado a la nación. Han participado en matanzas, robado millones del erario público.

Esa cárcel que, en su imaginario de corrupta, sería también para sus jefes y patrones, el Alito Moreno, Marko Cortés, Jesús Zambrano, Claudio X González. Cárcel para ella misma, acusada de tráfico de influencias y enriquecimiento ilícito por más de 1400 millones. Por su transa de la casa sucia que se le vendió a precio simbólico. Como pago a las construcciones que autorizó cuando era delegada de la Miguel Hidalgo.

Xóchitl también declara que devolverá lo expropiado a los extranjeros, el Litio sobre todo y que dejará las aduanas de la frontera norte a los gringos, traicionando la soberanía del país. Entregando el país a los gringos.

Xóchitl no dice que ese miedo viene desde el 2006 cuando Felipe Calderón inició su guerra contra el narco y que aun sufrimos sus consecuencias. Tampoco dice que ella misma formó parte de esa estrategia. Nunca hay que olvidar que una campaña basada en el miedo llevó a la dictadura a Adolfo Hitler.

Se le olvida a esta señora botarga gelatinosa que fue precisamente Felipe Calderón quien desató el miedo y la masacre, con su guerra contra el narco. Desde entonces México perdió la paz y la tranquilidad. Fue gracias al PAN, al PRI, de la cual Xóchitl forma parte como funcionaria desde el gobierno de Vicente Fox. Desde entonces se ha enriquecido con su corrupción y cinismo. Fueron la gente del PRIAN quienes sembraron y fomentaron el miedo, con sus corrupciones y genocidios.

Xóchitl Gálvez, por fin se descaró como lo que es, una sicaria del miedo, una vocera de la destrucción. Una mentirosa y falsaria.

 

 

El discurso del miedo: por qué nos convence más la emoción que la razón

 

El discurso del miedo consiste en comunicar riesgos asegurándonos que hay algo qué temer, con una narrativa de control que asegura mantenernos a salvo a través de cierta intervención. Este discurso masificado a través de las redes y los medios de comunicación masiva tiene una predominancia de contenido emocional por encima del contenido racional. Se recurre al miedo como una fuente poderosa de persuasión en tanto vuelve saliente nuestra vulnerabilidad, activa el deseo de sobrevivir y aumenta las decisiones rápidas no fundamentadas en un pensamiento central y cuidadoso.

El objetivo de este artículo consiste en abordar, desde la literatura de la psicología social, cómo funciona la persuasión a través del miedo, de qué forma activa heurísticos y rutas periféricas y los efectos que tiene en la toma de decisiones. Desde esta literatura se analiza un ejemplo de mensajes políticos sobre un gobernante mexicano, su contenido y sus repercusiones en el electorado.

Finalmente, se discute la forma en que las personas reciben la información y se cuestiona el papel pasivo que se les ha asignado, donde se les asume como meros recipientes y no agentes transformadores. De igual forma se discute los límites del discurso del miedo. (Reseña del ensayo escrito por Paola Eunice Díaz Rivera, catedrática de la UNAM)